Expresidente boliviano, Evo Morales y miles de sus partidarios iniciaron este martes una marcha contra su ex aliado, el presidente Luis ArceEl 11 de agosto, la marcha, que reúne a más de cinco mil personas, busca denunciar al gobierno de Arce, al que acusan de utilizar los tres poderes para frenar la candidatura de Morales a las elecciones de agosto de 2025. Las autoridades del partido oficialista acusaron a Morales de promover una «marcha de la muerte» con la que busca dar un «golpe de Estado».
Una marcha “para salvar a Bolivia”
En un discurso pronunciado al inicio de la caminata, Morales Él dijo que «Lamentablemente el presidente (Arce) y el vicepresidente (David Choquehuanca) nos abandonaron, nos traicionaron.Por cierto, hay mala gestión y corrupción”. El dirigente del Movimiento Al Socialismo (MAS) dijo que “La gente se moviliza cuando hay injusticia, cuando hay desigualdad” y aseguró que es una marcha «para salvar a Bolivia» y «por las futuras generaciones».
Por su parte, el dirigente campesino Ponciano Santos Afirmó: «Durante cuatro años hemos aguantado y resistido a Luis Arce«Estamos ya en Caracollo para iniciar la marcha nacional por salvar a Bolivia que encabeza nuestro comandante Evo». Santos acusó a Arce de ser un «traidor», un «dictador» y también un «títere del imperio», y amenazó con iniciar un bloqueo nacional de carreteras a fin de mes si no son convocados a discutir sus demandas durante los siete días que durará la marcha hacia La Paz.
La protesta arrancó en la localidad de Caracollo, al sur de La Paz, y tiene previsto llegar a La Paz, sede de los poderes ejecutivo y legislativo, el próximo lunes. Con Morales a la cabeza, los manifestantes caminan portando banderas de Bolivia, del MAS y «wiphalas», el símbolo multicolor de los pueblos indígenas. Sostienen que se trata de una marcha para «salvar al país» ante problemas como la escasez de dólares y combustibles, y el alza del precio de algunos productos básicos.
Organizaciones evo y grupos afines al gobierno se enfrentaron en la localidad de Vila Vila y se enfrentaron con piedras, petardos y presuntamente dinamita. Según el diario digital Erbol, dirigentes evo denunciaron durante la jornada que un grupo de simpatizantes del presidente Luis Arce esperaba a los manifestantes evo en los cerros. La policía se desplegó en la zona para tratar de evitar nuevos enfrentamientos.
Antes de iniciar la marcha, los manifestantes presentaron una ofrenda a la Pachamama para pedir que las deidades andinas los acompañen y también realizaron un mitin con discursos de sindicalistas a favor del expresidente y críticas al gobierno de Arce. La marcha se desarrolla en paralelo a un bloqueo de ruta iniciado por indígenas leales a Morales en localidades cercanas al lago Titicaca, quienes exigen la renuncia de Arce.
La Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) emitió un comunicado en el que “llama a las autoridades públicas y a todos aquellos que ejercen presión a comprometerse con un diálogo franco y sincero para resolver la compleja situación social” que vive el país. La CEB consideró además que los bloqueos de carreteras “no son la mejor solución” a la “preocupante situación política, económica y social” que vive Bolivia.
Una relación sin retorno
Morales acusa a Arce de bloquear su candidatura presidencial para que el mandatario sea el único candidato del oficialismoaunque Arce aún no ha dicho si buscará la reelección. Gobierno sostiene que Morales está inhabilitadoya que la Constitución no permite la reelección más allá de dos mandatos presidenciales consecutivos, aunque el ex jefe de Estado insiste en que no existe tal prohibición.
Arce acusó el martes a Morales de iniciar la marcha y apoyar un bloqueo indígena como parte de un «intento de golpe de Estado».Destruir, amenazar, bloquear y difundir el odio siempre será más fácil para quienes no creen en la democracia.“Para quienes se creen salvadores de escenarios de incertidumbre que ellos mismos pretenden promover. Pero el pueblo boliviano es sabio y estamos seguros que no se dejará engañar”, escribió el mandatario en sus redes sociales.
El ministro de Justicia, Iván Lima, criticó que «detrás de la marcha y los bloqueos que asedian al país» desde el lunes «hay un plan maquiavélico» para que el presidente del Senado, el candidato Evo Morales, se convierta en presidente de Bolivia «y desde allí forzar la candidatura ilegal e inconstitucional de Morales». Lima basó su acusación en una declaración de un abogado del expresidente, Orlando Ceballos, quien dijo que ante la «crisis generalizada» hay que «empezar a imaginar la sucesión presidencial establecida en la Constitución» y que ésta alcance «hasta el presidente del Senado».
Morales y Arce están distanciados desde finales de 2021 debido a diferencias en la gestión estatal que se profundizaron ante la necesidad de renovar la dirección nacional del MAS, algo en lo que las facciones leales a ambos no lograron ponerse de acuerdo. Los partidarios de Morales lo proclamaron reiteradamente como el «candidato único» para las elecciones de 2025, mientras que el bloque leal a Arce insiste en renovar la dirección del MAS.