Al cierre de la ventana internacional de noviembre Los Pumas visitaron París, enfrentar al equipo local en el Stade de France en el último capítulo de un año sumamente positivo para la selección argentina.
Francia llegó tras una justa victoria sobre Nueva Zelanda, 30-29, la Argentina de perder inmerecidamente contra Irlanda, 22-19, tras un polémico fallo arbitral que fue clave en el marcador final.
En los últimos cinco partidos solo hubo una victoria argentina, en la última ventana de julio, en el estadio José Amalfitani. En el Estadio de Francia, Los Pumas no ganaban desde 2014.
el partido
la atmósfera de San Denis Demostró la atención que le dio el público francés al duelo ante la selección argentina. El inicio fue bueno para Los Pumas, desde la recepción hasta el control que los llevó a la cancha francesa.
Pero al igual que la semana pasada, la selección argentina sufrió una tarjeta amarilla temprana, cuando estaba el capitán, Julián Montoya, fue amonestado por una acción que volvió a limpiar un alboroto. En esa primera presión francesa la defensa respondió bien. Sin embargo, en el segundo, la línea y el maul tuvieron buena resolución con el try de Flament (7-0).
Los Pumas con 14 jugadores no se quedaron atrás, y generaron un muy buen avance que estuvo a metros de ser un try. El penalti sancionado por el juez inglés Pearce se convirtió en puntos, con conversión de Albornoz (7-3). Francia aumentó en el inicio, tras una mala recepción argentina, con otro chut de Thomas Ramos (10-3) y A los 19 minutos Argentina volvió a marcar. con segundo penalti de Albornoz (10-6). Pero un penalti en el scrum del medio campo dio otra ventaja a los locales, con una nueva conversión de Ramos para poner el 13-6. El apertura tucumano Albornoz, a 25m, acercó a Los Pumas en el partido (13-9).
Las diferencias se marcaron en el uso del pie por parte de los franceses, con dos notables 50/22. Y un penalti evitable de Isgró dio otra oportunidad a los locales, aunque no desaprovechada. Sin embargo, se disputó en los 22 metros argentinos. Y así aumentó Francia, con el try de Villiere que amplió la brecha (20-9) y la aumentó aún más con un try de penal y otra tarjeta amarilla esta vez para Juan Martín González (27-9).
Los locales aprovecharon todo lo que tenían, el Argentina estaba jugando decididamente mal en ese tramo del partido, muy por debajo de las expectativas. En la última jugada, Ramos, con otro chut, dejó claro lo que hicieron ambos bandos en los primeros 40 minutos y selló el parcial de 30-9.
La segunda etapa
El inicio fue con dominio argentino a pesar de estar con 14 jugadores. Sin éxito, debido a la buena defensa francesa y algunas acciones de sanciones dudosas, con algunos penaltis no concedidos al equipo local con otros arbitrajes en ocasiones parciales.
Francia ya jugaba con el resultado a su favor, Los Pumas intentaron rescatar algún balón recuperado, pero todo con gran imprecisión. Sin dudas, los locales fueron categóricos cada vez que se colocaron en los 22 metros argentinos. No fue hasta el minuto 15 que los Pumas pudieron anotar. Tras una línea y un maul, el pilar Gallo, de nuevo ante Francia, anotó el try en el descuento (30-16).
Alrededor del minuto 17 llegó Francia y marcó, después dos balones bloqueados al recién ingresado Bazán Vélez. Bielle-Biarrey apoyó con un balón largo en carrera para poner el 37-16. El marcador fue exagerado acorde al desarrollo del partido. Un equipo local pragmático que no perdonó nada y otro que pagó caro cada uno de sus errores, además de sufrir demasiado por decisiones arbitrales dudosas. Y al 29, Los Pumas volvieron a anotar, con un pick and go apoyado por “Coco” Ruiz para cerrar el marcador con 37 a 23.
El final fue muy complicado, porque reiteración de errores en laudos arbitrales. Eso no significó que Francia no fuera mejor que Los Pumas, pero en ciertas decisiones, sin duda, el juez incidió para que el desarrollo no fuera más equilibrado en el marcador.
Terminó un buen año para el equipo. Con una ventana negativa (1-2) y el quinto lugar en el ranking mundial además algunas cosas para mejorar. Aunque también rescatando otra cara respecto a años anteriores.
Los entrenamientos:
Francia: 1. Jean-Baptiste Gros, 2. Peato Mauvaka, 3. Uini Atonio, 4. Thibaud Flament, 5. Emmanuel Meafou, 6- Francois Cros, 7. Paul Boudehent, 8. Charles Ollivon, 9. Antoine Dupont, 10. Thomas Ramos, 11. Louis Bielle-Biarrey, 12. Yoram Moefana, 13. Gael Fickou, 14. Gabin Villiere, 15. Léo Barré. Entrenador: Fabien Galthié
Argentina: 1. Thomas Gallo, 2. Julián Montoya (C), 3. Joel Sclavi, 4. Guido Petti, 5. Pedro Rubiolo, 6. Pablo Matera, 7. Juan Martín González, 8. Joaquín Oviedo, 9. Gonzalo García, 10 Tomás Albornoz, 11. Bautista Delguy, 12. Matías Moroni, 13. Lucio Cinti, 14. Rodrigo Isgró, 15. Juan Cruz Mallía. Entrenador: Felipe Contepomi
Estadio: Estadio de Francia, París. Árbitro: Luke Pearce (Inglaterra).
Los muchos: Primera parte: 8m, try de Falment convertido por Ramos (F); 14m, 19m y 25m, penales Albornoz (A); 15m, 22m y 40m, penales Ramos (F); 32m, try de Villiere convertido por Ramos (F); 35m, penalti de try (F). Segundo tiempo: 15m, try de Gallo convertido por Albornoz (A); try de 19m de Bielle-Biarrey convertido por Ramos (F); 29m, try de Ruiz convertido por Albornoz (A).
Advertido: 3m, Montoya (A); y 35m, González (A).