El Museo del Holocausto de Buenos Aires, junto con la Embajada de Estados Unidos en Argentina y el Instituto de Diálogo Interreligioso, entregaron los premios en la primera edición del premio “La Rosa Blanca”.
La ganadora del primer premio fue Agustina Sofía Mikaela Cruz, de la Escuela Secundaria N° 5 de Palpalá, Jujuy. “Conoce, Valora y Respeta: no dejes que el dolor te sea indiferente”, es la propuesta que la estudiante desarrolló durante el año 2023 y continúa en el actual curso escolar.
Se trata de una iniciativa contra la discriminación de las personas de la comunidad romaní (gitana), centrándose en mujeres y niños. El estudiante trabajó en conjunto con las familias, la escuela y la comunidad del pueblo de Palpalá.
Agustina viajará así a la ciudad de Washington, Estados Unidos, donde visitará la Museo Conmemorativo del Holocausto de Estados Unidos.
El segundo premio fue para Valentina Muñoz, de la EESN°1 Gral. Enrique Mosconi de la localidad de Ensenada, Buenos Aires. Lideró un grupo de estudiantes que borraron graffitis discriminatorios y colocaron mensajes positivos y esperanzadores en su lugar.
El jurado, integrado por el presidente del Museo Marcelo Mindlin, y la miembro de la Junta Directiva Aída Ender; El embajador de Estados Unidos en Argentina, Marc Stanley, el rabino Daniel Goldman, el sacerdote Guillermo Marcó y el líder de la comunidad musulmana Omar Abboud fueron los encargados de entregar el premio.
El evento fue presentado por el director del Museo Jonathan Karszenbaum, y también estuvieron presentes la sobreviviente del Holocausto Mónica Dawidowicz, el vicepresidente del Museo Guillermo Yanco, la secretaria general Fabiana Mindlin y el tesorero Gabriel Cohen.
“Este premio que hoy presentamos por primera vez es una oportunidad para llevar el mensaje de nuestra institución a todo el país”, afirmó el conductor del evento Mindlin, al participar en la ceremonia de premiación.
«Recibimos grandes proyectos y esperamos seguir recibiendo aún más, porque la lucha por una sociedad plural y democrática requiere multiplicar este tipo de iniciativas y fortalecerlas», agregó.
Por su parte, el Embajador Stanley destacó el trabajo de los dos ganadores, y los consultó sobre los desafíos de sus proyectos y su implementación. “La experiencia del Holocausto nos enseña la importancia de enfrentar con valentía la discriminación, y estamos orgullosos de ver esa enseñanza en sus acciones”.
El rabino Goldman, a su vez, destacó los proyectos y reflexionó que “en estos tiempos donde no se ve al otro como un prójimo, este tipo de acciones cobran relevancia”. Abboud se hizo eco de una tradición islámica que dice que “si uno ve una injusticia, debe usar sus manos para cambiarla. Y eso es precisamente lo que hicieron Agustina y Valentina”.
Finalmente, Ender destacó “la valentía y valentía de ambos, quienes lideraron acciones transformadoras para sus comunidades”.
El premio es un homenaje a la Rosa Blanca (Rosa Weisseen alemán), un grupo organizado por estudiantes cristianos de la Universidad de Munich que se oponían al nazismo. Dirigida por los hermanos Hans y Sophie Scholl, la Rosa Blanca llevó a cabo campañas de folletos y graffitis pidiendo una oposición no violenta contra el régimen nazi.