El Ejecutivo de la Ciudad de Buenos Aires anunció un paquete de medidas de alivio fiscal para monotributistas, comerciantes y jubilados que incluyen reducciones de impuestos y devoluciones de saldos de ingresos brutos. La oposición cuestionó la iniciativa por no tener «plan» y la calificó de «desorden fiscal».
Entre los puntos principales, la reestructuración incluye:
* Devolución de saldos de Ingresos Brutos en 96 horas a partir de un trámite express en línea que sustituye al TAD, con el que la acreditación de fondos podría tardar tres meses. Destinado a contribuyentes con SAF menor o igual a 2 millones de pesos.
* Exención ABL para jubilados y pensionados en base a la nueva propuesta aprobada por el Legislativo, que permitirá incorporar más beneficiarios. De un registro de aproximadamente 600.000 jubilados y pensionados en la Ciudad, actualmente 78.678 están exentos, total o parcialmente.
* Unificación con el Monotributo nacional que alcanzará a más de 200.000 contribuyentes que tributan al Régimen Simplificado IIB y busca agrupar las obligaciones nacionales y locales en un solo pago mensual. De esta forma, el pago se consolida en una cuota fija mensual, sin que se apliquen retenciones en cuentas bancarias ni en tarjetas de débito y crédito.
* Exención y/o reducción del impuesto para prestadores de servicios no profesionales registrados en el Régimen Simplificado, a través de un proyecto de ley que favorece a 138.000 contribuyentes y excluye a 79.590 personas con facturación anual hasta el límite superior del Tramo A ($6.450.000). A su vez, quienes facturen anualmente entre $6.450.000 y el límite superior del Tramo F ($24.250.000) obtendrán una reducción del impuesto. En estos casos, las tarifas se determinarán según el porcentaje de descuento de cada categoría: B (-35%), C (-30%); D (-25%); E (-20%) y F (-10%).
* Tasa 0% para contratos de arrendamiento con fines comerciales y viviendas con fines turísticos. También llegará a las operaciones de arrendamiento de vehículos, lo que según el oficialismo impulsará indirectamente a la industria automotriz. Asimismo, también está exenta del impuesto de timbre la compra y venta de una vivienda familiar por menos de 205 millones de pesos.
* Adhesión de la Ciudad al Régimen de Incentivos a las Grandes Inversiones (RIGI), establecido por el Gobierno Nacional en la Ley de Bases (27.742), y al Régimen de Regularización de Activos. Respecto al lavado de dinero, el proyecto busca eximir del pago del Impuesto a los Ingresos Brutos a las rentas de bienes declarados bajo este régimen.
* Regularización de deudas administrativas y judiciales de todos los impuestos recaudados por la Ciudad, a través de un proyecto que el Ejecutivo porteño enviará al Legislativo con propuestas de condonación de intereses compensatorios y punitivos.
* Desarrollo de la zona sur, particularmente de la colonia Barracas, a partir de la construcción de viviendas nuevas, con una reducción en la tasa del Impuesto de Timbres que pasará de 3.5 a 0.5 por ciento en el polígono delimitado por las calles Montes de Oca, California, Pasaje Río. Cuarto y Regimiento de Patricios.
Sobre este punto, escribió en las redes sociales ¿bloqueos de toda la Ciudad? la legisladora y presidenta del bloque Unión por la Patria en CABA, Claudia Neira. ¿Con qué criterios? ¿En el marco de qué plan? ¿Cómo se articula con el Código de Urbanismo que votamos hace días? En definitiva, ¿es improvisación o esta medida beneficia a alguien?
«El presupuesto fue aprobado hace días y hoy anuncia modificaciones tributarias. Claramente no hay ningún plan. Pero, además, hay un desorden enorme. Si querían hacer reducciones de impuestos, ¿por qué no las discutieron mientras tratábamos?» ¿La Ley Arancelaria y el Código Tributario? Esto impacta también en temas sensibles del Código de Urbanismo, también recientemente reformado”, insistió Neira en redes sociales.
En la misma línea, el diputado analizó que en el presupuesto 2025 se recortaron 327 mil millones de pesos, afectando inversiones para seguridad, transporte y recolección de residuos.
«Por un lado, publicaron los recortes que hicieron en el último minuto de la aprobación del presupuesto 2025 y supimos que se gastará menos, por ejemplo, en solucionar el problema de los presos fugados o en la higiene de la Ciudad. con la porquería que hay. Y por otro lado, anunciaron algunas reducciones de impuestos que implican más dudas sobre de dónde saldrá el dinero para sostener el déficit cero», concluyó.